Del Patrimonio de la Humanidad en Extremadura destaca la ciudad de Mérida y Cáceres
Del Patrimonio de la Humanidad en Extremadura, destaca la ciudad de Mérida en que encontramos, sobre todo, los vestigios de la cultura romana, pero también de los árabes que llegaron a la misma posteriormente, como la alcazaba.
Tampoco podemos olvidar la ciudad de Cáceres o el Monasterio de Santa María de Guadalupe, no muy lejos de allí, los cuáles nos dan una hermosa visión de la época medieval y todo ello es ideal para que los padres lo disfruten con los niños.
Mérida: cultura romana y árabe
El Patrimonio de la Humanidad romano reconocido en Extremadura se encuentra fundamente en Mérida, la antigua Emerita Augusta, actual capital de la Comunidad Autónoma y que nos da una idea de la vida de los romanos y está muy bien conservada. Por lo que diferentes elementos monumentales que la componen han merecido el galardón de la UNESCO, y los hace merecedores de ser visitados, ya que componen un conjunto histórico- artístico de gran belleza, y es un lugar en el que podemos disfrutar en familia de tal entorno.
A continuación, se expone un elenco de esos elementos monumentales:
- Teatro romano.
- Circo romano.
- Área funeraria de los Columbarios.
- Anfiteatro romano.
- Acueducto de San Lázaro.
- Casa del Anfiteatro.
- Acueducto de los Milagros.
- Baños romanos de Alurge.
- Arco de Trajano.
- Puente romano sobre el río Guadiana.
- Templo roano de Diana.
- Puente romano sobre el río Albanegas.
- Casa del Mitreo.
Sin salir de Mérida, tenemos otro Patrimonio de la Humanidad, esta vez de la cultura árabe: La alcazaba.
Es una fortaleza de planta cuadrada de sillares de granito y muros con reductos cuadrados. Fue donada después de la reconquista a la Orden de Santiago que le añadió torres y otras construcciones medievales con el fin de habilitarlo como convento y residencia.
En el patio de armas conserva el aljibe romano con bóveda de cañón, situado junto al río de forma que filtra agua continuamente. Se accede por una escalinata. Sede de la Junta de Extremadura.
Cáceres medieval
Más de una decena de torres presiden el casco antiguo de Cáceres, delimitado por murallas de época árabe. Calles empedradas jalonadas de casas-fortaleza medievales y palacios renacentistas componen las estampas más bellas de esta ciudad declarada Patrimonio de la Humanidad.
Su historia se halla estrechamente vinculada a una de las rutas históricas peninsulares: la Vía de la Plata, calzada romana que unía Sevilla y Astorga, y que fue utilizada por los peregrinos que se dirigían a Santiago de Compostela.
Los derivados del cerdo y las recetas de origen pastoril son el fundamento de la rica tradición culinaria de la zona, platos que siempre deberán ir acompañados por los excelentes vinos cacereños.
El conjunto monacal de Santa María de Guadalupe, sin salir de la provincia de Cáceres, también representa la época medieval. Consta de cuatro partes: el templo-basílica, el edificio del auditorium, el claustro mudéjar y el claustro gótico.Es de estilo gótico-mudéjar y está flanqueado por ocho torres, entre las que destacan la de Santa Ana y la de Portería. El retablo del altar mayor es de gran belleza y está realizado en madera.
El sagrario es, en origen, un escritorio de Felipe II del siglo XVI. La sillería del coro, del siglo XVIII, es de dos pisos y de una excelente traza. La sacristía está profusamente decorada. En la capilla de San Jerónimo está una de las obras más importantes de Zurbarán, ‘La Apoteosis de San Jerónimo’. El monasterio fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Además, alberga el museo del bordado, una importante colección de libros miniados y otra de lienzos de Zurbarán.
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