Donde comer y que ver en la excursión a Morella en familia
Presidida por un imponente castillo y rodeada por 2 Km de murallas, la capital de la comarca de Els Ports es una joya medieval. Morella es considerada “uno de los pueblos más bonitos de España” y está cada vez más cerca de ser declarada Patrimonio de la Humanidad Inmaterial de la UNESCO. El reconocimiento que tiene desde 2016 es el de Ciudad Amiga de la Infancia. Tanto si eres valenciano o foráneo, una visita a Morella en familia es algo casi obligatorio, ¡te va a encantar!
Morella la vella
El casco antiguo de Morella está declarado Conjunto Histórico-Artístico. Para descubrirlo, lo más recomendable es recorrer sus calles empedradas y dejarte perder para ir descubriendo, a cada paso, increíbles rincones. Por ejemplo una puerta de madera donde los artesanos han dejado sus huellas y floridos balcones que dan color a las piedras. Si te fijas en las ventanas, verás muchas cubiertas por cortinas de hilo, ganchillo y bordados.
Como Ciudad Amiga de la Infancia, los en Morella los vehículos tienen el acceso limitado y la circulación restringida por el casco antiguo, para proteger el derecho a poder caminar seguros por sus calles.
A lo largo de este paseo irás descubriendo hermosos palacios y casas solariegas como la Casa Piquer (siglo XVI), la Casa del Consejo y los Estudios (XVI) , la Casa de la Cofradía de “Llauradors” (siglo XVII), la Casa Rovira (donde cuenta la tradición que San Vicente Ferrer obró el milagro de resucitar a un niño que su madre había ofrecido como sacrificio), el Palacio del Cardenal Ram (siglo XVI, hoy hotel), el del Marqués de Cruilles (siglo XVI), o el de los Ciurana de Quadres (siglo XIV). También pasaremos por la Casa de la Vila, el actual Ayuntamiento morellano, un edificio del siglo XIV que integra La Lonja, las salas góticas del Consell y de la Corte de Justicia. Puede visitarse, pues dentro suele haber exposiciones temporales.
Murallas medievales
Más de 2 Kilómetros de murallas rodean la ciudad de Morella, franqueada por 7 puertas y 10 torres. El recinto amurallado que hoy podemos recorrer data del siglo XIV, aunque fue levantado sobre la base de las antiguas murallas musulmanas.
Entre las puertas, encontramos la puerta del Rey, por donde entró Jaume I en Morella durante la Reconquista, la Puerta Ferrisa, escenario de la entrada del caballero Blasco de Alagón cuando tomó la ciudad a los musulmanes, o la Puerta de la Nevera, situada cerca de la nevera o pozo de nieve donde se guardaba la nieve.
En tu excursión a Morella en familia puedes detenerte en La Torre de los Juegos, conocida como el Portal de San Miguel, principal acceso al recinto amurallado, y donde los peques pueden disfrutar de una exposición de juegos tradicionales y ¡disfrazarse como auténticos medievales!
El Castillo
La urbanística adaptada a la montaña, hace de Morella un lugar para pasear, bien por dentro de la muralla como también por la umbría del Castillo, donde un bosque de pinos con sendas y la Alameda, garantizan un espacio de encuentro, verde y sin contaminar. ¡Ideal para ir en familia!
El Castillo de Morella ha sido una las fortalezas más imponentes del Mediterráneo por el que han pasado numerosas civilizaciones, y ha sido testigo mudo de diferentes batallas y contiendas, como el intento de conquista de El Cid Campeador, la Reconquista cristiana, la Guerra de Sucesión, o las guerras Carlistas. La historia emana de sus paredes y la sentirás en tu visita a Morella.
Es muy interesante si construcción, porque aprovecharon la roca natural. El castillo consta de plaza de armas, aljibe, varios torreones y restos de palacios reales y pabellones oficiales. El Palacio del Gobernador fue construido por el barón de Ytre en 1.713 sobre una cueva habitada desde tiempos prehistóricos. Ahora alberga una exposición sobre famosos personajes que han pasado por el castillo.
Basílica de Santa María la Mayor
Construida entre los siglos XIII y XVI, en estilos gótico y renacentista, la Iglesia Arciprestal de Santa María la Mayor está considerada una de las más bellas de la Comunidad Valenciana. En la fachada verás que sus dos portadas están adornadas con estatuas, son la puerta de los Apóstoles y la de las Vírgenes. Ya en el interior podrás detenerte en la singular escalera de caracol que asciende al coro realizada en estuco de yeso policromado, en el grandioso retablo churrigueresco del altar mayor, en las vidrieras originales de la escuela valenciana del siglo XIV, y en el monumental órgano de 4.000 tubos (obra de Francisco Turull), algunas de las joyas que alberga Santa María la Mayor. En la parte posterior del coro, observa el Pórtico de la Gloria y el Juicio Final, esculpidos en forma de friso.
Museo Tiempo de Dinosaurios
Morella y Els Ports tienen en sus tierras estratos que se formaron entre el Jurásico Superior y el Cretácico Inferior, entre 146 y 98 millones de años. El agua cubría estos valles que han dejado abundantes y valiosos restos de fauna marina y algas calcáreas. Así que para tu visita a Morella, apuntate el museo Tiempo de Dinosaurios, donde vas a poder disfrutar de una reproducción a escala real de este imponente animal. Junto al Iguanodon, Morella posee mucha riqueza paleontológica, desde terópodos carnívoros hasta enormes herbívoros, ornitópodos y acorazados. Inesperadamente tu visita a Morella en familia se convierte en un viaje al centro de la tierra, donde grandes y pequeños recorren el apasionante mundo de la geología y la paleontología a través de la colección de fósiles del Cretácico. Situado junto a la iglesia de Sant Miquel.
Gastronomía
Una visita a Morella es para pasar todo el día, e incluso quedarte a dormir y convertirla en «escapada de fin de semana». De modo, que también puedas degustar la excelente gastronomía morellana, una cocina tradicional de orígenes medievales que ha sido transmitida de generación en generación, utilizando siempre productos de la tierra.
Los embutidos son el entrante por excelencia, al igual que los deliciosos quesos artesanos de oveja y cabra, y las croquetas morellanas (envueltas en una oblea de pan ácimo, dándoles una forma triangular). Las carnes son también un elemento básico en la mesa morellana: costillas de cabritillo rebozadas, cordero al horno, ternera a la piedra o guisada, patés caseros, guisos, aves escabechadas, o un buen solomillo a la leña. También es muy típica la carne de caza (jabalí, corzo, ciervo, gamo, conejo, liebre, perdiz…), que se cocina en escabeche, estofada, en guisos, o a la brasa, y se acompañan con setas de temporada (otra de las joyas de la gastronomía de Morella).
Y además, no puedes irte de Morella sin probar dos de los grandes protagonistas de la cocina morellana: la trufa negra, que en temporada acompaña una amplia variedad de recetas, y los deliciosos flaons, una pasta dulce rellena de requesón y almendras que es el rey de las pastelerías.
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Cómo llegar a Morella
Morella se encuentra a 170 km de Valencia, es decir a 2 horas en coche; mientras que desde la ciudad de Castellón se encuentra a 100 km, aunque sigues necesitando 1:20h para llegar. Como buen pueblo medieval, parece que esté escondido y es muy impactante cuando lo empiezas a visualizar. En la página web del ayuntamiento encuentras toda la información para ir en coche o en autobús.
