El valor nutricional de los helados lácteos
Como se trata de productos dulces tendemos a asociar los helados a los postres. Sin embargo, también pueden ser una merienda adecuada, o incluso parte de una comida o una cena, así como un tentempié respetable.
Hay muchas posibilidades de realizarlos, aunque en este artículo nos centramos en los lácteos, también existen los de fruta. Como todo en la vida, el consumo en su equilibrio es sano, la idea es saber integrarlos en la dieta, y que se valoren por sus aportes nutricionales.
Se ha dicho que es “un plato” y, en efecto así es; no se trata ni de una chuchería ni de una cantidad de energía vacía. Desde un punto de vista nutricional, los helados de base láctea representan una buena opción frente a otros dulces ya que su contenido en leche los convierte en una fuente interesante de calcio y de proteínas de buena calidad.
Helados lácteos y fresas
Ingredientes:
– 2 tazas de fresas frescas
– 1 taza de leche
– 1/2 taza de azúcar
– 1 cucharadita de esencia de vainilla
Instrucciones:
1. Lava y corta las fresas en trozos pequeños.
2. En una licuadora, mezcla las fresas, la leche, el azúcar y la esencia de vainilla hasta obtener una mezcla suave.
3. Vierte la mezcla en una máquina para hacer helados y sigue las instrucciones del fabricante para hacer el helado.
4. Si no tienes una máquina para hacer helados, vierte la mezcla en un recipiente apto para congelador y mételo en el congelador. Remueve cada 30-45 minutos durante las primeras 3 horas para romper los cristales de hielo y obtener una textura más suave.
Helado de plátano y leche de coco (opción ideal sin lactosa)
Ingredientes:
– 3 plátanos maduros
– 1 lata (400 ml) de leche de coco
– 1/4 taza de azúcar
– 1 cucharadita de jugo de limón
Instrucciones:
1. Pela los plátanos y córtalos en rodajas.
2. En una licuadora, mezcla los plátanos, la leche de coco, el azúcar y el jugo de limón hasta obtener una mezcla suave.
3. Vierte la mezcla en una máquina para hacer helados y sigue las instrucciones del fabricante para hacer el helado.
4. Si no tienes una máquina para hacer helados, vierte la mezcla en un recipiente apto para congelador y mételo en el congelador. Remueve cada 30-45 minutos durante las primeras 3 horas para romper los cristales de hielo y obtener una textura más suave.
3. Helado de mango y leche de coco
Ingredientes:
– 2 mangos maduros
– 1 lata (400 g) de leche de coco
– 1 cucharadita de zumo de limón
Instrucciones:
1. Pela los mangos y corta la pulpa en trozos.
2. En una licuadora, mezcla los mangos, la leche de coco, la leche y el zumo de limón hasta obtener una mezcla suave.
3. Vierte la mezcla en una máquina para hacer helados y sigue las instrucciones del fabricante para hacer el helado.
4. Si no tienes una máquina para hacer helados, vierte la mezcla en un recipiente apto para congelador y mételo en el congelador. Remueve cada 30-45 minutos durante las primeras 3 horas para romper los cristales de hielo y obtener una textura más suave.
Según el Libro Blanco de los Helados, editado por la Sociedad Española de Medicina Familiar y Comunitaria (SEMFYC), los que tienen como ingrediente base la leche (helados de crema y de leche) presentan un valor nutritivo significativo por su alto contenido en proteínas (procedentes de la leche) y su riqueza en aminoácidos esenciales.
Además, son ricos en calcio, algunos al mismo nivel que un vaso de leche.
En cuanto a la vitamina B2, el consumo de 100 gramos de helado de leche puede cubrir entre un 10 y 15% de las necesidades diarias, tal y como afirman sus autores. Y también suelen contener vitamina A.
Fuente: El libro blanco de los helados
