Ruta de los Cátaros y su legado en la Comunitat Valenciana: Un viaje a través de la Historia
Las familias han sido, a lo largo de la historia, el pilar fundamental de la sociedad. Pero, más allá de su importancia en la vida cotidiana, muchas comunidades han dejado una huella imborrable en los territorios que les acogieron. Un caso excepcional es el de los cátaros o «bons homes», quienes, perseguidos por sus creencias, encontraron refugio en la Comunitat Valenciana a principios del siglo XIV. Su llegada marcó un antes y un después en el desarrollo cultural, económico y social de la región.
Los Cátaros: Guardianes de una Fe alternativa
Los cátaros eran seguidores de una corriente cristiana que buscaba la práctica más pura de la religión, en contraposición a las doctrinas defendidas por la Iglesia católica. Consideraban que el cristianismo oficial se había desviado de sus principios originales y defendían una vida basada en la austeridad y la espiritualidad. Su oposición al poder eclesiástico dominante les valió la persecución por parte de la Inquisición francesa, lo que los obligó a huir de sus tierras natales.
El Gran Éxodo hacia la Comunitat Valenciana
A inicios del siglo XIV, los cátaros emprendieron una de las migraciones más significativas de la Europa medieval. Huyendo desde la región de Toulouse, Carcasona y Albi en Occitania, atravesaron los Pirineos y recorrieron más de seiscientos kilómetros hasta llegar a tierras valencianas. Este movimiento se vio facilitado por las vías romanas y caminos medievales, así como por las rutas de trashumancia ganadera, que sirvieron de guía en su travesía.
La llegada de los cátaros a la Comunitat Valenciana no fue casual. Estas tierras, recientemente conquistadas por Jaume I, representaban un nuevo horizonte para aquellos que buscaban refugio y una vida en paz. Paradójicamente, el padre de Jaume I había muerto en la batalla de Muret defendiendo a los cátaros y sus territorios, por lo que su llegada a tierras valencianas también tenía un trasfondo de continuidad histórica.
El Legado Cátaro en la Comunitat Valenciana
Lejos de ser simples refugiados, los cátaros contribuyeron activamente al desarrollo de la sociedad valenciana. Su influencia se dejó sentir en diversos sectores económicos, como el ganadero y el textil, además de en la arquitectura gótica y el arte medieval. Gracias a ellos, la Baja Edad Media valenciana vivió un notable auge comercial y cultural, cuyo legado aún es visible en muchos rincones de la región.
Dos localidades que guardan un fuerte vínculo con la historia cátara son Morella y Sant Mateu. En Morella, el último cátaro conocido, Guillem de Belibaste, predijo que esta ciudad sería la «nueva Jerusalén». Aún hoy, en sus callejuelas y en la antigua judería, se pueden encontrar vestigios de su presencia. Por otro lado, en Sant Mateu, una numerosa comunidad cátara se estableció en la casa de la familia Mauri, oriunda de Montaillou, Occitania. Actualmente, el paseo junto a la muralla de la ciudad rinde homenaje a los cátaros que allí vivieron.
Un viaje al pasado
Recorrer los caminos que una vez transitaron los cátaros es sumergirse en una de las historias más fascinantes del medievo europeo. La ruta desde el Midi francés hasta la Comunitat Valenciana nos permite descubrir los vestigios de su legado, desde fortalezas y castillos hasta costumbres y tradiciones que, de una forma u otra, han perdurado en el tiempo.
Los cátaros no solo fueron perseguidos por su fe, sino también por su forma de entender la vida. Su historia es la de miles de familias que, forzadas por la adversidad, buscaron un nuevo hogar y dejaron una impronta imborrable en la tierra que les acogió. Hoy, casi setecientos años después, su legado sigue vivo en la Comunitat Valenciana, esperando ser descubierto por aquellos que desean conocer un fragmento desconocido y emocionante de nuestro pasado medieval.
Ruta de los Cátaros
Cuando nos plantearon hacer la ruta de los Cátaros, y empezamos a conocer mas sobre estas tierras nos plantearon centrarnos en las 4 zonas con mayor presencia en la la Comunidad Valenciana. Nuestra recomendación, que es lo que hicimos es ir a San Mateu y Morella el primero Día y dejar Albocasser y Culla para el segundo día.
San Mateu, un pueblo con mucha historia.
Villa medieval de gran relevancia histórica, fue el mayor refugio de la comunidad cátara en el sur de Europa. Llegó a tener 4.000 habitantes. Su influencia no sólo impulsó el comercio de la lana, convirtiendo a la localidad en un importante centro económico del Reino de Valencia, sino que también dejó una huella imborrable en su patrimonio. Su industria de la Lana, fue de gran importancia, exportado todos sus productos sobretodo a Italia. Aún hoy, este legado puede apreciarse en fuentes, cuevas ocultas y en las piedras de su casco histórico y la ermita de los Ángeles. Hoy en día ya no existe este tipo de industria, sin embargo se puede visitar unas almacenas, donde producen un aceite de muy buena calidad, y se puede realizar cata de aceite.
Recomendamos hacer la visita con un guía que explica muy bien toda la historia y los lugares de interés, estas visitas no se hacen todos los días, por lo que es peor reservarlo con tiempo, para ello podeis visitar la página oficia de la oficina de turismo de San Mateu , Nosotros descubrimos el pasado cátaro de la villa con acceso a la Iglesia Arciprestal, el campanario, con espectaculares vistas panorámicas, el Palacio de Villores y la cárcel medieval, testimonio del pasado de la localidad.
Además tuvimos la suerte de entrar en el museo de donde Juani, la dueña, nos enseño, donde tenían a los presos. Y nos contó que de allí se escapó hasta el mismísimo demonio. Una anedocta que los niños no olvidarán. Un mueso muy pequeño que vale la pena visitar.
Si decides comer allí, nosotros comimos muy bien en La Perdí de San Mateo, dónde el trato estuvo muy bien, y disfrutamos de la comida típica d ella zona. con un Menú elaborado con productos de proximidad. Es un lugar que también se puede ir con niños. Por que hay variedad de comida.
Morella
Morella, es uno de los pueblos, por no decir el mejor y mas bonito pueblo de todo el Maestrazgo. nosotors hemos ido varias veces, y nunca nos cansamos de repetir. Siempre sorprende con cosas nuevas.
La influencia del Maestrazgo en la historia de los cátaros fue tan profunda que Morella se convirtió en uno de sus últimos
bastiones. En este enclave medieval, los cátaros resistieron hasta el final, y según la tradición, fue aquí donde habitó el último cátaro de Europa y quien antes de morir profetizó que antes del fin del mundo los cátaros volverían a nacer y Morella sería su corazón, su lugar más sagrado.
Si vas en Familia os recomendamos hacer la actividad muy divertida, disfrutamos de una aventura única recorriendo las calles de Morella a través de un escape room al aire libre. Presentar un desafío, combinando el pasear por las preciosas calles de Morella, es una de las cosas que mas nos ha y les ha gustado a los peques. No podemos desvelar la experiencia, pero sin duda muy recomendable. En este desafío, se deberá resolver enigmas para encontrar el cráneo del dinosaurio Morelladon antes de que
una corporación norteamericana lo haga. Una experiencia inmersiva llena de misterio y acción que combina historia, ciencia y diversión.
Elegimos para dormir el Hotel Cardenal Ram. Precioso, aqui cenamos con un menú elaborado con productos locales donde la gastronomía tradicional se combina con un toque de vanguardia. buenísimo y muy aconsejable.
ALBOCÀSSER
Enclavado en el Alt Maestrat, este municipio destaca por su riqueza histórica y su papel como punto de encuentro de diversas culturas a lo largo de los siglos. Fue también refugio del pueblo cátaro, que halló en estas tierras un lugar de acogida y prosperidad tras huir de la persecución de la Santa Inquisición en Francia.
- 10:15 Tras la llegada, acompañados por una guía oficial, realizaremos una visita guiada por la ermita de Sant Pau, un emblema local que atestigua la herencia cátara en la región. Su historia está estrechamente ligada a la tradición que relata la aparición de San Pablo a unos pastores en el siglo XVI, un suceso acompañado del milagro de la purificación del agua.
- 12:00 Traslado a Culla.
12:30 – 18:00 CULLA
Localidad situada en una colina y declarada Conjunto Histórico-Artístico que simboliza la visión cátara del mundo como un lugar de prueba y trascendencia espiritual. Conserva un entramado de calles estrechas y empinadas, casas de piedra y antiguas fortificaciones.
- 12:30 Tras la llegada a la Masía Constanza, realizaremos una experiencia de trufiturismo, un auténtico tesoro gastronómico que crece en los bosques de encinas milenarias. Acompañados por un experto trufero y sus perros adiestrados, descubriremos el fascinante proceso de búsqueda y recolección de este preciado hongo, apreciado por su intenso aroma y su exclusividad en la alta cocina.
- 14:00 Disfrutaremos de una comida en el restaurante La Carrasca rodeado de un ambiente cálido y familiar que refleja la esencia de Culla.
- 16:00 Visita guiada por el castillo en ruinas, la prisión (antiguo granero del Comendador de la Orden de Montesa), la Iglesia Parroquial El Salvador (construida sobre los restos de un templo medieval) y disfrutaremos de las espectaculares vistas desde diferentes miradores.
- 18:00 Traslado hacia València.
19:30 VALÈNCIA
- 19:30 Llegada a València, final del itinerario y despedida.